Hay momentos de la vida en los que deseamos modificar nuestra casa, ya sea por nuevo integrante en la familia, la necesidad de tener un estudio o área de trabajo o simplemente para mejorar la calidad de los espacios.
Antes que nada, es importante conocer la diferencia entre remodelación y ampliación, porque la inversión económica y el tiempo varían mucho en ambos casos.
El término remodelación lo usamos cuando hacemos una modificación en los materiales o realizamos un ajuste en la distribución del espacio existente, por otro lado, una ampliación es cuando se añade un espacio nuevo a la vivienda aumentando los m2 construidos.
Si deseamos remodelar o ampliar nuestra casa lo primero que debemos considerar es el peso extra que podría significar dicha modificación especialmente si deseamos construir un nivel más, por lo tanto, resulta pertinente asesorarnos con un especialista en estructuras para verificar que la cimentación de la vivienda soporte la carga adicional o bien nos brinde alternativas para reforzarla.
La remodelación de una casa puede darse con la finalidad de consolidar la construcción, es decir, cambiar los materiales temporales por otros más resistentes y duraderos, por ejemplo: cambiar un techo de lámina y reemplazarla por una losa maciza de concreto, colocar un acabado en un piso de tierra, colocar cancelería en las ventanas o bien construir muros de tabique para reemplazar las divisiones improvisadas con cortinas o láminas.
Una remodelación también puede ser con fines estéticos, para esto no siempre es necesario invertir mucho dinero en las modificaciones, en ocasiones el simple hecho de cambiar el color a las paredes o los muebles hacen la diferencia, también se pueden generar espacios más amplios visualmente quitando muros intermedios, así mismo hacer nuevas ventanas o ampliar el vano de las existentes nos ayudan a generar una sensación de amplitud, además de ventilar e iluminar mejor el espacio.

Cuando se requerimos ampliar nuestra casa debemos verificar que la normatividad nos permita tener una mayor superficie de construcción, el número máximo de niveles construidos y la altura máxima permitida, con estos valores sabremos que tanto podemos construir dentro del marco legal.
Si lo que se desea es agregar solo un espacio más, por ejemplo, un baño, una recamara o un estudio, lo más recomendable sería ampliar la casa de forma horizontal (si el terreno lo permite) ya que esto nos ahorraría dinero y tiempo.
Sin embargo, si queremos construir un nuevo nivel porque se necesitan aún más espacios o no hay la posibilidad de extenderse horizontalmente, hay que tomar en cuenta las siguientes consideraciones:
- Antes de iniciar la construcción se debe reforzar la estructura actual.
- Asegúranos de contar con los permisos de construcción necesarios.
- Se pueden aprovechar los huecos, patios o escalera ya existentes para empezar a construir.
- Verificar que los muros del nuevo nivel coincidan con los del primer piso para mantener los mismos ejes estructurales.
- Es importante no dejar espacios sin ventanas para asegurar la habitabilidad de la casa.
